18 marzo, 2024

Sierra Leona: la situación está controlada desde ayer en el país africano, donde en los últimos días han estallado violentas manifestaciones en la capital, Freetown, y en varias ciudades

El balance provisional de las manifestaciones en Sierra Leona es de al menos 24 muertos: seis policías más una docena de civiles. Tras las protestas de los últimos días, la calma ha vuelto al país de África Occidental En el estado más pobre del continente africano, el descontento de la población por el alto coste de la vida ha provocado en los últimos días disturbios y enfrentamientos con las fuerzas del orden, que sólo se calmaron ayer, después de que el gobierno, en un intento de contener la violencia, impusiera un toque de queda y bloqueara Internet. Cientos de personas protestaron porque se encontraban en una situación desesperada debido al empeoramiento de las condiciones económicas provocado por la fuerte subida de los precios del arroz, el petróleo y, en consecuencia, el combustible. La iniciativa partió de un grupo de mujeres comerciantes, que convocaron una manifestación pacífica tras varios llamamientos lanzados en las redes sociales. La antigua colonia británica, con sus 7,5 millones de habitantes, atraviesa una situación difícil, marcada por la guerra civil, que la desgarró de 1991 a 2002, la epidemia de ébola, que estalló en 2014, la pandemia de Covid-19 y las consecuencias de la guerra en Ucrania.

Manifestaciones en varias ciudades del norte

Las protestas en el país, donde, según el Banco Mundial, más de la mitad de la población vive por debajo del umbral de la pobreza, se concentraron en el norte y el oeste. El miércoles se produjeron violentos enfrentamientos en la capital, Freetown, donde los manifestantes exigieron la dimisión del presidente, Julius Maada Bio, al que consideran incapaz de frenar la crisis económica, en Kmakawi y Makeni. Los manifestantes lanzaron piedras a las fuerzas de seguridad y quemaron neumáticos. Las imágenes que circularon en los medios de comunicación mostraban nubes de humo, gases lacrimógenos y agentes armados que vigilaban las calles. Varias comisarías fueron objeto de vandalismo. El jefe de Estado, de visita privada en el Reino Unido, regresó inmediatamente a su país para atender la emergencia. Ayer, la conexión a Internet estaba ampliamente bloqueada, los comercios permanecían cerrados en la capital y la gente, temerosa de los disturbios, no salía de sus casas. La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, se mostró “alarmada por los numerosos muertos y heridos” en Sierra Leona y pidió al gobierno que “lleve a cabo investigaciones rápidas, imparciales y exhaustivas”, añadiendo que las autoridades “deben autorizar las protestas pacíficas, en lugar de impedirlas, y abstenerse de dar respuestas desproporcionadas e innecesarias, como el bloqueo de Internet y la imposición de toques de queda”.

Tiziana Campisi